En nuestro recorrido por la ciudad alemana de Colonia,visitamos las ruinas romanas de la muralla que la protegía.La ciudad fué una colonia tan importante  para el imperio que su nombre deriva de él:colonia.Las aguas del Rhin,no solo son un medio eficaz para el transporte comercial, sino también para el turístico. En una de sus orillas se levanta el Museo del Chocolate Stollwerck.Su visita interior muestra la importancia que le mercado del cacao tuvo en las relaciones comerciales para Colonia y para gran parte de Europa.Tambien descubrimos que el cacao es amargo y el sabor dulce del chocolate se consigue añadiendo azucar.
Colonia está dividida en 9 distritos y cuenta con 85 barrios en la actualidad. Pero durante la II Guerra Mundial la ciudad sufrió 262 bombardeos aéreos y fue destruida totalmente. La catedral, que también sufrió daños importantes en la II Guerra Mundial, es el punto de referencia de la ciudad, pero no está sola, porque Colonia sigue destacando por el gran número de iglesias medievales, lo que en el pasado le valió el nombre de “La Santa Colonia”. A la ciudad llegan cada día más de 1.000 trenes que dan una idea del potencial que ofrece la ciudad desde que en 1947 comenzó la reconstrucción sistemática y que desde entonces no ha parado. En Colonia también hay momentos para disfrutar de sus bares y restaurantes, sentarse junto a una jarra de cerveza y degustar sus platos típicos. La presencia de grandes estrellas del cine y de la televisión forman parte de la visita de la ciudad.