El puerto de Bermeo reúne la más importante flota de pesca de bajura de todo el Mar Cantábrico.
Las casas de los pescadores son objeto de un curioso hecho. Al parecer todas fueron pintadas del color de la barca del pescador dueño de la casa, identificándose la una con la otra.
La Torre Ercilla, actualmente acoge al Museo del Pescador, es un palacete urbano no edificado como torre militar aunque a simple vista guarde parecidos.